Que mejor sitio para descansar que irse a un
balneario a que me cuiden y me relaje pensó Alicia y cogió el tren camino de
Gerona.
Como hacía muchos años que no subía a un tren disfrutó mucho del viaje,
pero notó que estaba en silencio cosa que ella nunca había visto en un tren o
en el metro nadie hablaba y ella que tenía ganas de hablar se acercó a una
chica que llevaba una gatera y le dijo que gato más bonito y ella le dijo que
su gato notaba mucho los cambios y que estaba haciendo todo lo posible para que
su misino estuviera tranquilo y que deseaba que nadie se sentara al lado de
ella.
Ella se acordaba al talgo camas para ir a
Sevilla y allí incluso se hacían amigos con los pasajeros.
Cuando se bajó no veía el balneario, pero si un bar donde se comió un
buen bocadillo de jamón.
Se puso a andar y vio el balneario le enseño al recepcionista su reserva
de una habitación con balcón alli le dijeron que hasta las tres de la tarde no
estaría libre eso la contradijo porque había pasado una mala noche y con la
tensión más alta de lo normal así es que buscó una sala tranquila y se quedó
dormida en una silla hasta que llegó un empleado y le dijo que esa sala era
privada para socios que jugaban al ajedrez.
Se dio un paseo por el hotel y en las paredes había fotografías de
personajes rancios de televisión no gratos.
Dieron las tres y fue de nuevo a recepción y le dieron la llave de su habitación,
pero el aire acondicionado no enfriaba y la televisión tan poco.
Y no podía descansar así es que se fue a la terraza del bar y como era
domingo y estaba lleno de gente del pueblo que habían ido a disfrutar de la
piscina y del bar y también había muchos con un bono de fin de semana y leían
periódicos y jugaban a cartas alli se distrajo un rato y luego entró en el
restaurante comió poco porque era cara la comida.
Otra vez a recepción a dar las quejas
por el aire acondicionado y como no lo podían arreglar hasta el lunes Alicia
llamó a un taxi y volvió con su querida familia a su casa de la playa y con los
baños estivales se le fue regulando la tensión.
Maribel