Ramas de Eucaliptos.
El jueves, a primera hora de la mañana, paseando por Las
Ramblas vi a una señora de aquí que llevaba unas ramas verdes envueltas
formando una ramo, destacaba entre los rubios turistas vestidos sin gusto ,con
sandalias y calcetines.
Me resultó sencillo el ramo, era un ramo que también veo en
la Zona Alta cuando voy al dentista y se les ve muy alegres a estas señoras que
superan los cincuenta, a las que me imagino que cuidan mucho de su hogar y yo
como curiosa y hogareña , deseaba poner en mi jarrón vacío uno.
Pero siempre iba de paso y a hacer algo. Hasta que hoy
casualmente le he dicho a mi marido por favor cariño acompáñame al mercado del
barrio antiguo más cercano, ya que en el nuestro sólo hay un centro comercial
donde todo es “estándar” y sin solera.
Magnifico el ramo que me he comprado, resulta que es un ramo
de eucaliptos pero de hojas redondeadas y más gruesas que los eucaliptos de La
Fuente de mi pueblo, con cuyas semillas me hacía pulseras y collares de niña.Y mi madre echaba en la estufa de carbón, para
que oliera bien la estancia o los vapores de eucaliptos que respirábamos para
los resfriados .
Aquí en la distancia de la ciudad, están también las hojas
de estos árboles gigantes pero ornamentales y conservan el olor a invierno.
Maribel Fernández Cabañas
PD. Os recomiendo un blog sobre escritura de mi profesora
Débora Castillo:”Los lunes en mi casa”
No hay comentarios:
Publicar un comentario