La gente.
¿Qué hace la gente un día de cada día en el paseo marítimo?
Los viejos ir en pareja cotilleando de sus conocidos y con
ropa de calle, gorra y bastón.
Dos casados haciendo chistes machistas de sus mujeres
mientras van, a duras penas, haciendo footing. Aunque, eso si, bien equipados
con ropa deportiva de marca.
Un grupo de extranjeros pasan andando con sus maletines de
empresa hablando en francés y no los entiendo, aunque estudié este idioma en el
bachillerato. Van con traje de chaqueta con pantalón o falda según corresponda,
parece que acaban de salir de una reunión y la van comentando. Por sus caras,
no muy conformes.
Los que son turistas y acompañados de sus hijos, se hacen
fotos y juegan en la pirámide que hay en la arena.
Me llegan los primeros olores a comida, olor a cebolla frita
y a paella de marisco de los
chirringuitos-restaurantes que dentro de un rato acogerán a
muchos comensales en este lugar privilegiado, para hacer un alto en su trabajo
de oficina de la gran urbe.
Maribel