Mi espacio de paso.
Es un lugar con luz tenue de lamparitas que cuelgan del
techo y bajan acercándose a las mesitas redondas blancas, aunque hay multitud
de lámparas de tubo blanco que están más alejadas de mí y apagadas, porque
cuando yo voy es a la hora del café… de noche me imagino que las encenderán.
Me siento en una de las butacas orejeras de color rosa-fucsia, oigo el hilo musical mientras un
camarero todo vestido de negro me dice:” madame “ y yo le contesto un café por
favor. Es una cafetería de un hotel internacional en pleno centro de la capital
y a su alrededor todo son pisos viejos, donde vive medio Marruecos, es una zona
del casco antiguo donde se han asentado los inmigrantes de cultura islámica y
es curioso los veo sentados al sol en los bancos de la plazoleta de la puerta
trasera del hotel y parece que no hacen nada pero sí , están rezando el Corán.
Maribel Fernández Cabañas.
Acabo de leer los tres últimos relatos.Veo que son como imágenes que pasan delante de mí, mientras los leo.Raro es el final que no me sorprende.Besos.
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